Orientación parental

Ser fuerte, es pedir ayuda



TESTIMONIO
«La orientación parental me abrió los ojos. Al principio cada dos semanas, luego según la necesidad, podía explicar las situaciones, cómo me sentía, lo que veía. Y ella me descifraba las cosas, me explicaba por qué habíamos llegado a ese punto, me proponía alternativas. 
Por fin tenía claves de lectura, me abrió los ojos sobre lo que vivía mi hija. Me sentí una mejor madre, porque finalmente, entendía mi hija y podía actuar. Esto alivio nuestras relaciones, hizo que mi hijoase sintiera seguro, y recuperé confianza en mí.»


¿POR QUÉ?
Romper el aislamiento vía un espacio de palabra seguro, coger en cuenta la experiencia de los padres, desciframiento de las situaciones y los desafíos, consejos, proposición de enfoques diferentes, seguimiento, apoyo, acompañamiento.
Hablamos relaciones entre los hermanos, autonomía y adquisición, comportamiento, comunicación, confianza en sí, empoderamiento de las familias, diálogo con los seres queridos y los profesionales.
También podemos abordar la vida íntima y afectiva u otros temas no siempre fáciles de abordar con un profesional en estructura.


¿EXACTAMENTE QUÉ?
Escuchar, luego información y formación de los padres sobre estrategias educativas personalizadas en función de su familia.
Con el objetivo de simplificar las cosas comprendiéndolas, para favorecer la calidad de vida de los padres y del nin@, disminuir las dificultades del cotidiano.


LA PROPUESTA
– Sesión de 50 minutos aproximadamente, individual o en pareja.
– Antes de la primera sesión, aprecio que me envíe un correo electrónico de presentación para mejor prepararme al contexto.
– Durante la sesión en presencial o en videollamada, el formato es flexible. Podéis hablar primero o no.
– En caso de videollamada, la cámara es necesaria para la introducción, luego podéis apagarla.
– No hay compromiso, hacéis la o las sesiones que necesitéis.
– Antes o después de cada sesión, sois libres de enviarme un correo para expresar vuestra experiencia o hacer preguntas.


EL VALOR
64€ IVA incluido (21% de IVA incluido) por sesión.

Reservar mi sesión descubrimiento 20 min gratuita

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OTROS LUGARES PARA LA ORIENTACIÓN PARENTAL (fr)
Orientación parental
Recursos y seminarios web Hapyk
Guía de supervivencia de la persona autista Jean-Philippe Piat
Pódcast La fatigabilidad
Formación y recursos Ideereka
Séverine Chapuy sesión y consejos basados ​​en sus vídeos
Aurélie Crétin TTC para niños con TND
Astrid Kremmer TEA API TND TDAH perfil sensorial, acompañamiento
Ser hermana o hermano de una persona en situación de discapacidad
CR2 evaluación de trastornos asociados y comorbilidades, psicoeducación, entrenamiento a las habilidades sociales


MÁS INFORMACIÓN
Muchas familias con nin@s autistas o portadores de discapacidad, de trastornos psiquiátricos o de diferencias tienen la cabeza bajo el agua.
La mayoría del tiempo, los ayudadores no son ayudados, y a menudo demasiado poco escuchados.
Una familia ayudada, es un nin@ o un joven que se recupera más rápidamente.
Una familia ignorada, es a menudo la entrada hacia los tratamientos por la crisis del joven, por la puerta de urgencias, o incluso tratamientos u hospitalizaciones sin consentimiento.
Escuchar y apoyar a las familias es una prioridad, para favorecer el restablecimiento y evitar que la situación del joven empeore.

Seamos claros, los padres no son la causa de un autismo, de un TDAH, o de ningún otro trastorno del neurodesarrollo. No se trata en absoluto de culparlos, cuestionarlos o, como lamentablemente se ha repetido durante años, señalar con el dedo a una madre que es «demasiado o insuficiente» y un padre ausente.
No, orientar a los padres, definitivamente no consiste en intentar educarlos para hacer mejor.
Eso sí, los padres son actores clave en el desarrollo de su nin@, y es aquí donde la orientación parental, como una forma de descodificación de las situaciones, puede ofrecerles perspectivas interesantes y herramientas para su parentalidad. Que ejercen como deseen, como pueden, según su personalidad y su historia.

Cada familia escribirá la suya.
La orientación parental solo es una propuesta de rotuladores, lápices, plumas y bolígrafos.


LA SITUACIÓN DEL JOVEN
La persona que se siente derrotada por el dolor, la fatiga, la tristeza, los fracasos, atrapada en su dolor, impotente ante su realidad frente a una ausencia de opciones, sin escapatoria frente al estrés y la ansiedad, suele ser aplastada por esta carga y verse sin salida, con una inmensa dificultad para proyectarse hacia un futuro más tranquilo.
El sentimiento de no tener ningún control sobre su vida o su estado es extremadamente doloroso.
La mayoría del tiempo, la vergüenza abruma al niñ@ o al joven.
Y se sienten ilegítimos a pedir otra vez ayuda.
Comportamientos de desafío, o de encerramiento pueden aparecer.
Ideas suicidarías también pueden ser presentes. 
En general, la persona no desea dejar de vivir, sino que desea dejar de sufrir.
Su dolor, del cuerpo y mental, es real, y a tener en cuenta.

La persona necesita apoyo discreto, estar bien rodeada.
En un periodo de crisis, no es el momento de hablar o de intentar construir un proyecto con nuestro hij@.
En un periodo de crisis, nuestro papel como padres es cuádruple:
– Responder a las necesidades primarias
– Seguridad física y emocional
– Estar cerca y presente
– Aguantar y sostener
– Callarse (!)

No os quedéis solos como padres o seres queridos, y si vosotros mismos estáis afectados, no os quedéis solos. Vuestro sufrimiento es real, poder hablar de ello y recibir apoyo sin ser juzgado es importante. Tenéis derecho a ello.
En la página de recursos, encontraréis diversas pistas y lugares recursos.

Estos consejos no sustituyen la opinión de un profesional de la salud.